En su artículo El sentido de las palabras (suplemento Domingo del 18 de enero), Josep Ramoneda cuestiona la utilización del término "genocidio" para describir la invasión de Israel en estos días pasados. En apoyo de su argumentación -la palabra "genocidio" se utiliza demasiadas veces en vano- cita una definición procedente del diccionario de la RAE: "Exterminio o eliminación sistemática de un grupo social por motivo de raza, de religión o de política".
Pues bien, si acudimos a un diccionario especializado, como es el de Derechos Humanos de Hernando Valencia, vemos otra definición tomada de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de las Naciones Unidas: "Destrucción o tentativa de destrucción intencional, en todo o en parte, de un grupo nacional, étnico, racial o religioso".
Los más de 1.000 muertos y 5.000 mutilados lo han sido, parece ser, por su condición de palestinos (grupo nacional), porque no parece que los más de 6.000 fueran miembros de Hamás. Y, además, incluso quedándonos con el diccionario de la lengua española, ¿cabe alguna duda de que la matanza ha sido sistemática?
Este número de víctimas y el atroz sufrimiento infligido al resto de la población palestina no parece que conviertan en un simple exceso verbal la palabra "genocidio".
8 comentarios:
A mí me dan igual las palabras, aunque sé que no son inocentes nunca. Lo que me importa es la salvajada que se ha hecho. Pienso que jurídicamente tiene un tratamiento u otro según la palabra, pero que los hechos son los mismos al final.
Yo soy partidaria de que se juzgue a Israel, por el capítulo que corresponda. A veces he pensado cómo se juzgaría si el resto de España hiciéramos una buena muralla en torno al País Vasco, los aisláramos por tierra, mar y aire, justificando nuestra actuación en que allí hay terroristas, proterroristas y votantes de los terroristas; al cabo de unos años podríamos bombardear Bilbao y otras ciudades, diciendo que en cualquier sitio hay terroristas, sin sacar antes a la población civil ni nada de nada. Cuando contaran los muertos por terrorismo y las pobres personas muertas en los bombardeos sería un escándalo. No sé si es un disparate histórico la comparación, pero lo que sí sé seguro es que sería un disparate muy parecido.
Sólo de pensarlo se me ponen los pelos de punta, Clares, espero que ningún fascista genocida tome nota de ello.
Hoy se ha celebrado el día de la memoria del Holocausto y me da mucha pena que los que antes fueron víctimas ahora actúen de verdugos.
Un fuerte abrazo, compañera.
Me sumo a la reflexión de Clares...Y los puristas del lenguaje ¿dormirían tranquilos si los muertos fueran sus hijos?¿buscarían el significado exacto en el diccionario? En fin....Un abrazo
Lo de Josep Ramoneda es vergonzoso, le oigo a menudo en la SER, pero lo de este artículo ya no tiene nombre... me ha decepcionado totalmente y estoy completamente de acuerdo con las reflexiones del amigo Pedro López.
Y contigo también, querida Marisa.
Un fuerte abrazo.
Los que antes fueron víctimas
hoy se vengan de su propia suerte
Inhumano,increíble,y como duele
no poder frenar el genocidio!
Besos,y juntos por la Paz
¡Cuánta razón tienes, Mia!
Besos para tí, y gracias por estar ahí.
demasiado triste todo lo ke está pasando, no se puede añadir mucho más a lo que ya han comentado por aquí. Salvajada, sin cerebro ni corazón.
Parece mentira que tras tanto sufrimiento por el que han pasado los israelitas ahora sean capaces de hacer lo mismo y sin remordimientos.
Ayer estube viendo el reportaje de Jon Sistiaga sobre la Franja y no pude dejar de llorar en ningún momento. Terrible!!!!!
Que cantidad de burradas podían llegar a decir algunos israelis, de verdad.....
Es verdad, Valzarest, nos quedamos sin palabras para condenar estas matanzas, este genocidio.
Es verdad que los que sufrieron el holocausto no son estos judíos, estos israelíes; aquellos estoy seguro de que sentirían vergüenza si supieran en qué se iban a convertir sus descendientes. No todos los israelíes tienen un comportamiento tan fascista, afortunadamente. Los grupos pacifistas y los jóvenes israelíes que se niegan a ir al ejército para no reprimir a los palestinos se arriesgan a ir a la cárcel.
Han aprendido de sus verdugos y asesinan a la población palestina sin remordimientos, como tú dices. Mientras, los gobiernos europeos se limitan a hacer la pelota al gobierno terrorista de Israel. Una vergüenza.
Un fuerte abrazo.
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