Una vez recogidas las aceitunas del olivo, se cortan o machacan, y en un recipiente se mantienen en agua unos veinte días. Hay que cambiarlas el agua cada dos días para que vayan perdiendo su amargor.
Pasado este tiempo se las quita el agua y en una vasija de barro o porcelana se las va echando sal, ajos, orégano, tomillo, romero, laurel y cáscara de naranja en capas sucesivas de aceitunas. Finalmente se las añade agua de nuevo.
Con este aliño se mantendrán para que vayan cogiendo sabor gracias a todos los ingredientes. En unos quince días podremos disfrutar de unas ricas aceitunas.
2 comentarios:
andá!
no sabía que había que echarles cáscara de naranja a las aceitunas para que asentaran bien!
que de cosas descubre una dando una vuelta por la red oye!
por cierto... FELIZ NAVIDAD!!!
Si es que esto es como una enciclopedia, Bea, aquí se aprende de todo un poco ;)
Lo mismo te deseo... ¡¡¡FELICES FIESTAS!!!
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